Me desperté una mañana,
y vi que un pájaro me hablaba.
Me dijo que estoy lleno de mañas,
y me recomendó que me calmara.
Me levante de mi cama,
me fui derecho al baño.
Vi en el espejo mi cara
y un mosquito me dijo "te extraño".
Cuando salí por la puerta,
el perro me dio los buenos días.
No entendía una mierda,
pero eso problema no seria.
Llegue corriendo al trabajo,
el auto ya me estaba esperando.
Vi animales comiendo ajo,
mientras un árbol me estaba hablando.
Volví a mi casa muy tarde,
ya mi cuerpo no aguantaba.
El Sol jugaba a gastarme,
mientras se escondía cuando giraba.
Entonces volví a mi casa,
otra vez el perro me abrió la puerta.
De café me bebí una taza,
y saque un limón de la huerta.
Entre a mi habitación,
me tire en mi cama.
No aproveche la ocasión,
y simplemente dije: "hasta mañana".
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